Cada año, los incendios por causas eléctricas en los hogares provocan la muerte de 350 personas en los Estados Unidos y dejan otros 1,000 heridos. Algunos de esos incendios son provocados por fallas en el sistema eléctrico y defectos en los electrocomésticos, pero muchos más son provocados por el mal uso y mantenimiento deficiente de los electrodomésticos, cableado instalado incorrectamente, y circuitos y cables de extensión sobrecargados.
Existen algunas medidas sencillas que pueden tomarse para prevenir la pérdida de vidas y los daños materiales como consecuencia de los incendios por causas eléctricas.
El Problema
Durante un año típico, los problemas eléctricos en hogares provocan 28,000 incendios y $1,000 millones en daños materiales. El cableado eléctrico de las casas provoca el doble de incendios que los electrodomésticos.
Los Hechos
Diciembre es el mes más peligroso para los incendios por causas eléctricas. Las muertes por incendio son más numerosas en los meses de invierno debido a la mayor cantidad de actividades en interiores y a un aumento en el uso de luces, calefacción y electrodomésticos. La mayoría de los incendios a causa del cableado eléctrico se inician en el dormitorio.
La Causa
Cableado Eléctrico
La mayoría de los incendios eléctricos son consecuencia de problemas con la «instalación eléctrica fija», como tomacorrientes defectuosos y cables viejos. Los problemas con cables y enchufes, como extensiones de cables y de electrodomésticos, también causan muchos incendios eléctricos residenciales.
Muchos incendios por causas eléctricas prevenibles pueden relacionarse con el mal uso de cables eléctricos, como circuitos sobrecargados, mantenimiento deficiente y cables ubicados debajo de las alfombras o en áreas de mucho tránsito.
Electrodomésticos
Los electrodomésticos más comúnmente involucrados en los incendios de este tipo son las estufas y hornos eléctricos, las secadoras de ropa y las unidades de calefacción locales y fijas.
Precauciones de seguridad
- Revise regularmente el cableado y los electrodomésticos.
- Los cables dañados pueden provocar incendios. Reemplace de inmediato todos los cables de electrodomésticos gastados, viejos o deteriorados.
- Use con precaución los cables de extensión y no los sobrecargue.
- Mantenga los electrodomésticos alejados de pisos y mostradores húmedos; preste especial atención a los aparatos ubicados en el baño y en la cocina.
- Cuando compre electrodomésticos busque productos que hayan sido evaluados por un laboratorio nacional reconocido, como Underwriters Laboratories (UL).
- No permita que los niños jueguen con, o cerca de, electrodomésticos como calentadores de espacios, planchas y secadores de cabello.
- Mantenga las prendas de vestir, cortinas y otros objetos potencialmente combustibles como mínimo a tres pies de distancia de todos los calentadores.
- Si un electrodoméstico tiene un enchufe de tres puntas, úselo únicamente en un tomacorrientes para tres puntas. Jamás haga que entre en un tomacorrientes para dos puntas o en una extensión.
- Jamás sobrecargue los cables de extensión ni enchufes de paredes. Apague inmediatamente, y luego haga que un profesional cambie los interruptores de luz que estén calientes al tacto y las luces que parpadean. Use tapas de seguridad «a prueba de niños» en los tomacorrientes.
- Revise regularmente sus herramientas eléctricas para detectar signos de desgaste. Si los cables están dañados o agrietados, reemplácelos. Reemplace cualquier herramienta que provoque una pequeña descarga eléctrica, se recaliente, haga un cortocircuito o emita humo o chispas.
Contar con un detector de humo que funcione aumenta enormemente sus probabilidades de sobrevivir a un incendio. Asegúrese de que todos los pisos o plantas de la casa tengan un detector de humo que funcione y pruebe todos los detectores una vez al mes.
- Detectores con baterías alcalinas (de 9 voltios): cambie las baterías al menos una vez al año. Si un detector suena con un «silbido corto» para avisar que tiene baja batería, cambie la batería de inmediato.
- Detectores con baterías de larga vida (litio): las baterías de estos detectores de humo están diseñadas para durar hasta diez años. Si el detector emite un silbido corto, reemplace el detector.
- Reemplace los detectores de humo cada 10 años o según las instrucciones del fabricante.
Por último, recuerde practicar frecuentemente con su familia un plan para salir de la casa en caso de incendio.